- El Infante Luis Fernando de Orleans y sus abuelos, los Duques de Montpensier, de tránsito por Caldas
Laureano Salgado, con el seudónimo de Fray Prudencio, escribió “Paliques n’a veira d’o adro”. El caldense, en 1901, recopiló los “Paliques”, redactados en lengua gallega, que había ido escribiendo y publicando semanalmente en el periódico “Fray Prudencio”… (Seguir leyendo el Tomo Primero... y el Tomo Segundo). *Descargar y visualizar en PDF.
– Reparto del aguinaldo norteamericano
Parte de la obra escultórica de D. Manuel Erosa Poza está expuesta de modo permanente al aire libre, en una finca próxima al domicilio familiar, de tal manera que cualquier caminante la puede contemplar. Entre otros, fueron para él motivo de inspiración el deporte, la religión y las labores agrícolas…. (Seguir leyendo).
D. Ricardo señala como autor de los artículos agrupados bajo el título “Paliques n’a veira d’o adro” a José Salgado. Dicha atribución de paternidad literaria no se corresponde con la realidad dado que, como se concluirá de los datos que a continuación se exponen, el autor de los referidos Paliques, con el seudónimo de Fray Prudencio, no es José sino su hermano Laureano, conocido principalmente por su polifacética actividad empresarial… (Seguir leyendo).
En Galicia, durante décadas, la emigración a América en busca de fortuna ha sido una constante. El continente americano significaba para los gallegos el lugar donde trabajando se podía mejorar económicamente e incluso hacerse rico. Existía la creencia generalizada de que era fácil hacer fortuna en los países americanos. Esta idea era agrandada por las noticias que enviaban los emigrantes, en muchas ocasiones exagerando la realidad y encubriendo las penalidades que tenían que soportar…. (Seguir leyendo).
Número especial del semanario caldense, “Fray Prudencio”, dedicado a principios del siglo XX al «Apóstol» del Regionalismo Gallego, Alfredo Brañas. Destaca el nivel y la cantidad de colaboradores que participan, con la iniciativa de Laureano Salgado… (Seguir leyendo).
Falta ahora que el propietario de Acuña caiga de la burra persuadiéndose de que es necesario herrar o dejar el banco; pues aquel asqueroso caserío no sirve para el caso… (Seguir leyendo)
A mediados del mes de julio de 1929 se reunieron en el Ayuntamiento de Caldas las fuerzas vivas de la localidad con objeto de tratar acerca del monumento que se proyectaba dedicar a los filántropos caldenses, hermanos Fermín y Dolores Mosquera Vázquez, que habían donado a la villa dos colegios de primera enseñanza, y a Juan Fuentes Echeverría que había contribuído con 160.000 pesetas para la construcción del Mercado de Abastos de la localidad… (Seguir leyendo)
En el psiquiátrico de Conxo (Santiago de Compostela) falleció en el mes de agosto de 1918 el joven y distinguido escritor de Caldas de Reis, Enrique Amado. Llevaba ingresado en aquel sanatorio compostelano unos dos o tres años… (Seguir leyendo)
En apenas 28 puntos se desgrana la breve historia de la Fábrica de Azúcar de Portas, desde su fulgurante inicio y las ilusiones que provocó, pasando por su desmantelamiento, hasta su reciente recuperación para uso socio-cultural y lúdico… (Seguir leyendo)
Una persona de la que se ha hablado o escrito poco en Galicia y el País Vasco, a pesar del relevante papel que desempeñó en virtud del cargo de Gobernador civil de Bizkaia que desempeñó durante los primeros meses de la Guerra Civil española, es José Echeverría Novoa que nació hacia 1902, en Pontevedra, en el seno de una familia católica practicante, formada por el padre, José Echeverría Harguindey, y la madre, Marina Novoa Patiño, junto a José y varios hermanos más, Marina, Clemente y Carmen. Los Echeverría Harguindey eran originarios del País Vasco Francés; levantaron fábricas de curtidos en muchos pueblos de Galicia. A sus componentes los encontramos avecindados en diversas localidades gallegas, como Pontevedra, Santiago, Caldas de Reis, etc… (Seguir leyendo)
Conociendo que Jenaro de la Fuente Domínguez había realizado algunos de sus trabajos en Caldas de Reis y observando, con ojos de profano en la materia, cierta similitud estética entre la cúpula, la buhardilla con tres óculos o ventanas y la esquina semicircular de la planta inmediatamente inferior del impresionante edificio Bonín de Vigo, y sus equivalentes del inmensamente más modesto inmueble que, a finales del siglo XIX, encargó Laureano Salgado construir en Caldas de Reis, pensé que podrían haber sido proyectados por el mismo arquitecto. Para despejar mi duda tuve la fortuna de encontrar a D. Jaime Garrido Rodríguez, arquitecto con la especialidad de “Restauración de Monumentos”, quien me informó que, efectivamente, el edificio propiedad de D. Laureano en el que el Banco Pastor había tenido durante años sus oficinas en la villa caldense, y el de Vigo referido, tenían la misma autoría, Jenaro de la Fuente Domínguez… (Seguir leyendo)
A comienzos de este verano me acerqué hasta el Concello de Caldas de Reis, con objeto de hacer una consulta en el departamento o sección de Urbanismo. Mientras esperaba, a que me atendiera un Técnico, observé, encima de un armario, un busto de yeso o escayola en el que se representaba a un varón de unos 50 años más o menos, con prominente calvicie que le propiciaba una amplia frente, grueso bigote y barba, complementada su vestimenta con la clásica pajarita… (Seguir leyendo)
Margarita Santos Zas, de la Universidad de Santiago de Compostela, escribe “a partir de 1833 se asiste en Galicia a un desarrollo espectacular de la prensa y desde entonces hasta el siglo XX ha habido una sucesión ininterrumpida de publicaciones; sorprende todavía hoy el número de periódicos existentes en Galicia en la segunda mitad del siglo XIX, no solo en sus principales ciudades sino en las villas y localidades pequeñas, prensa comarcal; al igual que llama la atención su diversidad en cuanto a objetivos, intereses, orientación ideológica y carácter se refiere. En los años 80, del XIX, considerados, unánimemente, la Edad de Oro de la prensa gallega, se registran más de 250 periódicos, portavoces de sectores sociales, grupos políticos y organismos varios, con periodicidad diaria, semanal o quincenal y una vida por lo común bastante efímera. De hecho, cada año surgen varios periódicos, pero desaparecen otros”… (Seguir leyendo)
A finales del siglo XIX y primeras décadas del XX era conocida la fecundidad de los ríos gallegos y no era infrecuente encontrar en las riberas de los mismos a aficionados ingleses a la pesca que conocían esa abundancia. Muchos de los ríos gallegos se considerarían excelentes en Inglaterra. No era corriente alcanzar cifras mayores de pesca en Inglaterra que las que se obtenían en Galicia… (Seguir leyendo)
Estos días del presente verano se cumplen cien años de la estancia de Sofía Casanova en Caldas de Reis. Concretamente el 15 de julio de 1919 llegó a Caldas la ilustre escritora gallega con el fin de pasar la temporada de veraniega invitada en casa de Laureano Salgado. Su permanencia en la Villa, complementada con visitas y excursiones a diferentes lugares de Galicia, se prolongó hasta mediados de septiembre. El empresario caldense no se había limitado a admirar y aplaudir su labor periodística y literaria, sino que le abrió las puertas de su casa, ofreciéndole el reposo que necesitaba. Le acompañaban su hermano, el también literato D. Vicente Casanova, y una pariente, Dª Francisca Gracia… (Seguir leyendo)
Una de las grandes iniciativas industriales de capitalistas gallegos, en la Galicia de principios del siglo XX, fue la construcción de la Fábrica de Azúcar de Portas. España había quedado desabastecida de azúcar, a raíz de la pérdida de Cuba, tras la guerra de España con Estados Unidos en 1898. El Gobierno fomentó la producción de remolacha y la instalación de fábricas azucareras, lo que dio lugar en España a una expansión descontrolada del cultivo del tubérculo y a la multiplicación del número de refinerías. Dos de ellas se situaron en Galicia, una en Portas y otra en Iria-Padrón… (Seguir leyendo)
Álvaro Cunqueiro, escritor de poderosa y fecunda imaginación, en uno de sus artículos publicado en 1960, en el diario La Noche, comentaba que Caldas de Reis tenía para él un recuerdo que le hacía posible domiciliar en la villa cualquier fábula; acaso Caldas sea -añadía- un país fácil para cuentos como los recogidos de ancianas bocas fecundas por los hermanos Grimm… (Seguir leyendo)
Hoy en día el gusto por los toros en Galicia es muy reducido. Casi no hay afición. El entusiasmo en la población gallega por las reses bravas no tiene nada que ver con el existente en otros lugares de España. El último refugio que queda actualmente en Galicia a los aficionados al arte de Cúchares es la plaza de toros de Pontevedra, aunque no siempre fue así… (Seguir leyendo)